Arrancó la temporada en el fútbol paraguayo y en el Ciclón ya empezó a relucir su calidad Juan Manuel Iturbe, quien es su flamante refuerzo, pero su caso no es para nada parecido al de estos que en su momento llegaron con el mote de ser la solución, lo que el equipo necesitaba, lo que quedó en el mote y nada más.
El arco azultrana no estuvo excento de las joyas incomprendas y que lo cuente a eterna promesa argentina Joaquín Irigoytía, alla por el 2003 se presentó con el cartel de campeón del mundo con la Albiceleste sub 20 para ser el gran sucesor de Bobadilla, eso sí, sus malas actuaciones pemitieron el debut de Diego Barreto bajo los tres palos en la Capital del Sentimiento.
Es bien sabido que el lateral izquierdo siempre ha sido un cupo dificil de cubrir para los equipos paraguayos, pues el Club del Pueblo tanteó con grandes valores, como el argentino Alcides Piccoli en 2008, su compatriota Lautaro Formica en 2011 o el ecuatoriano Paul Ambrosi, todos con rótulo de grandes jugadores pero no pasó ni chicha ni limonada, con uno y cada uno de estos jugadores.
Pasando por el medio campo, el caso de Flavio Zandoná, no podémos dejar pasar, llegó con el cartel de campeón de América, siendo una de las grandes figuras de Vélez Sarsfield de Argentina, unos años atrás, sin embargo en aquella temporada del año 2000 acabó siendo una lágrima en filas de Cerro Porteño. Pero no le supera al también argentino Darío Scotto, cuyo paso fue tan fugaz que ni siquiera hay fotos de él con la casaca azulgrana.
Como no resultaron los argentinos, el Ciclón decidió probar con centroamericanos, específicamente con Froylán Ledezma, el hombre gol, que llegaba como gran promesa desde el Ajax de Holanda, pero lo único brillante de su llegada, fue cuando firmó su contrato presentándose con un lente de sol con marco blanco, después no pasó nada en la cancha.
Y cómo olvidar al gran Juan Fernández D’Alessio, quien de entrada tuvo la inmensa responsabilidad de reemplazar al Patito Aquino. Más intermitente que lucecitas de Navidad, terminó siendo relegado al banco de suplentes y pronto despachado de barrio Obrero. O Germán Castillo, el santafesino que llevaba la 10 pintada en la espalda, pero solo en pintura, porque en la cancha ni pinta de jugador parecía tener.
El hombre del ascenso argentino, el que logró el ascenso con varios en el vecino país, también vino a probar suerte, hablamos de Mariano Campodónico, quien se pasó más lesionado que jugando, convirtiendo apenas 1 gol en su corta estadía en el club. Germán Alemanno sique se lleva todo el crédito de ser, posiblemente, el paquete más caro, traído de la mano del profe Jorge Fossati, con un sueldo de unos 20.000 dólares, según se había filtrado en su momento, apenas duró 6 meses para retornar al fútbol peruano, donde decía sentirse a gusto.
Y como broche de oro, está el goleador de las Eliminatorias, el boliviano Marcelo Moreno Martins, al que le rastrearon tanto el vuelo de venida, con los azulgranas esperando con ansias su venida, así como su vuelo de ida, con los mismos hinchas, pero asegurando que ya no vuelva. Nunca supo asentarse en el plantel, haciendo que su pase sea un veradadero fracaso en la Capital del Sentimiento.
